Dictado Rítmico

En muchos de mis artículos he hecho uso del formato estándar de partitura de batería. Sin embargo, a veces queremos acordarnos de un cierto ritmo y no tenemos ni donde apuntarlo, o es menester comunicarnos rápidamente con otro músico o con alguien que no sabe nada de estas cosas. Es en tales circunstancias que debemos estar en condición de apelar a un dictado rítmico básico. Recurriendo a una analogía, equivale a lo que llamamos "tararear" una melodía pero aplicado al ritmo, y en nuestro caso, a la batería.

El Dictado Rítmico, entendido en términos muy sencillos, no es más que simular con monosílabos los golpes sobre nuestro set de batería para fijar un patrón determinado. Es algo así como recurrir a la onomatopeya de nuestros elementos percutorios pero agregándoles algunos caracteres básicos:

  • Identidad (voces fácilmente reconocibles)
  • Matiz (intensidad sonora)
  • Dinámica (acentuación relativa)
  • Temporalidad (métrica y tempo)

Las dos primeras voces a fijar son el bombo y la tarola, el primero con la más grave y prolongada (v.gr. "tum") y la segunda con la más aguda y seca (v.gr. "ta").

Comencemos rescatando algunos de los patrones más comunes para una métrica de "4/4" a ritmo de corcheas. Tengan presente que los golpes sobre el hi-hat no se pronuncian, pero su anotación con "x" sirve para saber el tiempo que media de uno a otro golpe, entre los cuales ubicaremos un guión para separarlos gráficamente:

  • "tum-x-ta-x-tum-tum-ta-x"
  • "tum-tum-ta-x-tum-tum-ta-x"
  • "tum-x-ta-tum-tum-x-ta-x"
  • "tum-x-ta-tum-tum-x-ta-tum"
  • "tum-x-ta-tum-x-tum-ta-x"
  • "tum-x-ta-tum-x-tum-ta-tum"
  • "tum-x-ta-x-tum-tum-ta-tum"

En el caso de los cortes sobre los tomes, se arman monosílabos con las letras "P" para las corcheas y "R" para las semicorcheas, variando la vocal que les acompaña de acuerdo al tiempo del compás. v.gr. un fill de compás completo a ritmo de semicorcheas se expresaría así:

  • "pa-ra-pa-ra-pe-re-pe-re-pi-ri-pi-ri-po-ro-po-ro"

Si lo que queremos denotar es un siseo en el hi-hat, podemos recurrir a una "S" prolongada, algo así como cuando pedimos silencio, en tanto que si quieres expresar un redoble se puede apelar a una "T" seguida de varias "R", como cuando simulas el sonido de una metralleta.

No existe una regla fija para el dictado rítmico, pues en realidad se puede emplear cualquier voz que pueda simular el sonido de tu set, pero la idea fundamental es que permita tanto la evocación de un ritmo como la comunicación con otros músicos. Sea cual sea la que escojas, la cuestión básica es que tú la entiendas y te sirva para hacerte entender.